Instalar suelo radiante es una decisión muy acertada para aquellos usuarios que desean disfrutar de calefacción en invierno y refrigeración en verano. Este es un sistema de climatización muy rentable a nivel energético que se puede combinar, tanto con gas natural, como con energías renovables.

Qué es el suelo radiante

El suelo radiante es un tipo de climatización cuya canalización se integra bajo el suelo de la vivienda. Es una muy buena opción porque distribuye el calor de forma homogénea por toda la estancia y, como proviene del cielo, no se pierde en la parte alta de la habitación, contribuyendo a mantener una temperatura agradable durante más tiempo.

Su funcionamiento se lleva a cabo a través de un circuito de tuberías, las cuales, reciben el agua caliente proveniente de la caldera o de la bomba de calor, e irradian el calor a través del suelo para calentar toda la estancia.

Aunque es menos habitual, también se puede instalar en el interior de paredes y techos para mantener la temperatura de la vivienda con distintas fuentes de calor.

Tipos de suelo radiante

El suelo radiante se puede clasificar en diferentes tipos dependiendo de las siguientes características:

  • Su tipo de funcionamiento: agua o electricidad
  • Su capacidad de climatización: calor y/o frío
  • Su posición en el inmueble: suelo, pared, techo o zócalo

Suelo radiante por agua

El suelo radiante por agua permite disponer de un sistema de refrigeración y de calefacción. Está compuesto por tuberías de polietileno situadas bajo el suelo, por las que circula agua caliente o fría, y puede ser alimentado por diferentes sistemas:

  • Acoplado a una caldera de gas natural, la cual, calienta los tubos de agua mediante la combustión del gas. Por tanto, solo se puede emplear para generar calefacción
  • Acoplado a un sistema de aerotermia o geotermia, que proporcionan calefacción y refrigeración. El primero recoge la energía del aire y el segundo la proveniente de tuberías enterradas en el subsuelo.

Suelo radiante eléctrico

El suelo radiante funciona por medio de un conjunto de resistencias eléctricas que se calientan y transmiten ese calor a la loseta instalada por encima. Solo produce calor, por lo que su funcionamiento limitado, aunque su instalación más sencilla.

Es recomendable en climas mediterráneos, dónde no se requiere de altos usos de calefacción en invierno, ya que el precio de la luz es mucho más elevado.

Cuánto cuesta instalar suelo radiante

El coste de su instalación varía en función de los siguientes aspectos:

  • Los metros cuadrados de la vivienda
  • El coste del suelo y del cemento que lo recubre
  • El tipo de suelo radiante: eléctrico o por agua
  • El coste de colocar el suelo

Para hacernos una idea, estos son los precios de una instalación de suelo radiante por agua en función de los metros cuadrados de la vivienda:

Tamaño Precio
60 m2 6.600 € – 7.560 €
80 m2 8.800 € – 10.080 €
100 m2 11.000 € – 12.600 €
120 m2 13.200 € – 15.120 €
150 m2 16.500 € – 18.900 €
180 m2 19.800 € – 22.680 €
200 m2 22.000 € – 25.200 €

Cabe destacar que si se trata de una vivienda que ya está construida, a estos precios será necesario sumarle el coste de levantar el suelo antiguo e instalar una loseta especial.